450 carteles informan de los daños que, según Monumentos Alavista, ha provocado Entre Catedrales · También se organizarán visitas para mostar los desperfectos
Monumentos Alavista emprende una campaña contra el Ayuntamiento de Cádiz. La empresa que gestiona la Casa del Obispo ha decidido informar al turista de los daños que, a su entender, ha sufrido el yacimiento como consecuencia de la obra Entre Catedrales.
Concretamente, 450 carteles de gran formato editados en español y en inglés se han distribuido por estas instalaciones, para dar cuenta de cada uno de los desperfectos. Según informa Germán Garbarino, gerente del yacimiento, la cartelería se ha ubicado estratégicamente para señalar "las humedades, filtraciones, goteos o desprendimientos producidos por las obras".
Pero no queda aquí la cosa. Los socios de Monumentos Alavista emprenderán otra campaña de visitas guiadas los meses de julio y agosto, la de mayor fluencia de público, que refrendará este mensaje. Bajo el título "Visite la destrucción del patrimonio de 3000 años" pretenden mostrar durante los fines de semana "la forma en que la estructura de Entre Catedrales ha perjudicado a los restos excavados en el solar", dice.
También se va a informar de que "debido a la falta de conexión" existente entre este imponente mirador proyectado por Campo Baeza y el edificio de la Casa del Obispo, "se filtra el agua de las lluvias en los restos arqueológicos. Además, desde la plataforma se arrojan desperdicios al yacimiento", comenta.
En este punto, un informe emitido por la Delegación Provincial de Cultura recogía que aunque "no se han registrado daños, debido a las lluvias caídas se ha producido una pérdida de tierra en los restos", por lo que aconsejaba "proyectar una solución para canalizar el agua".
Garbarino añade que si a final de septiembre "el Ayuntamiento de Cádiz, al que le hemos enviado numerosos informes a lo largo de estos tres años -incluido el de esta última campaña-, no arregla tales desperfectos, les entregaremos las llaves del yacimiento y acudiremos al contencioso administrativo por daños y perjuicios".
Respecto "a los daños interiores", se resumen, según Garbarino, en filtraciones de agua en el criptopórtico romano anexo a la puerta de salida al solar; en la parte de la cisterna romana de época republicana que alberga el edificio, así como en la zona superior de los muros y techos de este misma área, sin duda el más perjudicado, "como consecuencia de la perforación de las placas de piedra ostionera realizadas desde el exterior".
A esto se suma el deterioro de unas 108 piezas que componen la pasarela traslúcida, "con motivo de las vibraciones sufridas". Toda una serie de desperfectos cuya reparación asciende a 110.000euros, según estima.
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